ER
TABARDILLO
Tráfico
rock
18/02/2000
Er Tabardillo presenta su segundo
álbum
en la Fiesta del
X Aniversario
de Discos Tráfico
Resulta
sorprendente ver hasta qué punto un determinado pub o
una tienda de discos puede llegar a convertirse en nucleo aglutinador
de una escena musical. Si hablamos de Murcia y nos ceñimos
al rock más duro (rock radical, metal, punk-sin-pop...),
el asunto tiene un nombre ineludible: Tráfico,
la tienda de discos sita en la plaza del beato Hibernón
y regentada desde su iincio por el incombustible Floro. Allí
encontrarás reseñadas todas las actuaciones cercanas,
los viajes organizados, las ofertas y demandas de los grupos,
los fanzines, viejas y nuevas maquetas y ese disco de difícil
localización. Hablar de metal en Murcia es hacerlo de
Tráfico.
Bien, pues la tienda de Floro cumple 10 saludables añitos
y para festejarlo han decidido organizar una fiesta-concierto
en la murciana sala Gamma, mañana sábado, que contará
con las actuaciones en directo de Lucas Ruiz y Er Tabardillo,
la contundente banda murciana formada por Jesús Guirao
(voz, bajo), David Tornel (guitarra, coros, voz), Carlos de Lara
(guitarra) y Diego Moñino (batería), que hace apenas
un mes publicó su segundo larga duración, Pan,
pijo y habas. Charlamos con Jesús. Creo -señala
el cantante- que este disco es mucho más compacto, en
cuanto a sonido y también en la línea musical.
El anterior, como todos los primeros elepés, recoge una
trayectoria de varios años, con cambios en la formación
y diferentes maneras de componer. Pan, pijo y habas
lo trabajamos nosotros cuatro desde el primer momento y por tanto
es lógico que suene más uniforme. Estamos muy satisfechos.
El grupo, con más de siete años de trayectoria,
efectivamente parece mostrarse más cohesionado que nunca.
Musicalmente predomina el sonido punkarra por encima de otras
consideraciones más metaleras. Los textos siguen incidiendo
en la no-sumisión, así rock de combate
parece una buena etiqueta para la música y actitud de
Er Tabardillo. ¿O qué? Bueno, ahí
está. Siempre hemos llevado esa etiqueta de algún
modo. Hacemos rock, eso está claro, y entendemos que por
mediación del rock se puede combatir un poco la sociedad
que nos tiene de esta manera, con marginación y grandes
desigualdades.
El enemigo sigue teniendo un nombre claro: Mondo Capital. Rotundamente.
No hay un título tan claro como Capitalismo stop
(de su primer álbum), pero sigue siendo el mismo enemigo.
Incluso ahora más. Con todo el tema de la unificación
europea, el capitalismo se está reestructurando hacia
posiciones cada vez más radicales, incrementando las enormes
desigualdades entre ricos y pobre. Ante eso, entiendo que hay
que reaccionar de algún modo. El disco ha visto
la luz a través de Maldito, una discográfica valenciana,
el lado más rock de Matarile. Queríamos buscar
otra compañía que se implicara más que Discos
Suicidas (que publicó su primero). Todo lo hemos pagado
nosotros, desde la grabación hasta la edición,
así que llegamos a un acuerdo con ellos porque nos prometieron
buscarnos conciertos y festivales, como el próximo Viña
Rock, y también porque tienen una buena distribución
a través de Zero.
Una característica peculiar en las canciones de Er Tabardillo
es la reivindicación que hacen del panocho, el viejo dialecto
murciano. En esta ocasión reflejado en dos cortes, Giné
er matachín y La gentualla. Sólo
hay dos en panocho porque el resto de letras me salió
en castellano, sólo eso. Pero desde luego que seguimos
reivindicando la cultura popular murciana. El hecho de cantar
un par de temas así creo que sirve para poner nuestro
grano de arena. El concierto de presentación del
disco, como ya ha quedado dicho, coincide con la fiesta del X
aniversario de Discos Tráfico. Floro y Manolo fueron
quienes más nos alentaron a sacar nuestro primer disco.
Siempre nos han apoyado. Cada nueva maqueta la ponían
a la venta, nos echaron una mano con el trabajo logístico
y siempre les estaremos agradecidos.
Compartiendo cartel con Er Tabardillo estarán los también
murcianos Lucas Ruiz, cuya última maqueta contiene siete
temas de rock a medio camino entre Red Hot Chili Peppers y el
blues-rock más hendrixiano. Un estudio de
personalidad en clave guitarrera, la de este grupo con nombre
de psiquiatra profesional. Freud haría rock. |